El Impresionismo y las Artes Escénicas

P.ROMÁNTICO

El Impresionismo y las Artes Escénicas

La presencia periódica de los Ballets rusos de Serge Diaghilev en París a partir de 1908 y el reclutamiento del joven Ígor Stravinsky -discípulo aventajado de Rimsky-Korsakov- como compositor «residente» de la compañía, no supondrá sino una nueva transferencia de la corriente impresionista rusa a la francesa, cuya plasticidad y capacidad evocadora hicieron de las artes escénicas un destino natural de sus creaciones artísticas: Debussy en su ópera –Pelléas et Mélisande– de una originalidad musical extraordinaria; Stravinsky con un lenguaje que evolucionó desde el impresionismo de El pájaro de al primitivismo de La consagración de la primavera [1913] hasta llegar al serialismo de Agon [1957]; Ravel con su Ballet Daphnis y Chloé de 1912], cuya ambientación clásica y sensual lo asemeja al Preludio a la siesta de un fauno debussyano.

Las fronteras del Impresionismo

La onda expansiva del Impresionismo sacudió la música de su tiempo más allá de las fronteras francesas, influenciando a autores como los españoles Issac Albéniz, Manuel de Falla; el italiano Ottorino Respighi o el inglés Frederick Delius y permanece en el tiempo en autores como Olivier Messiaen quien se inscribe fundamentalmente en una esfera post-impresionista, de la cual llegó a convertirse en un peculiar sistematizador.

Isaac Albéniz (1860 – 1909) Suite Iberia para piano / 3 movimientos:

Manuel de Falla (1876 – 1946) Noche en los Jardines de España

Ottorino Respighi (1879 – 1936) Poemas Sinfónico Pinos de Roma

Olivier Messiaen (1908 – 1992) Fête des belles eaux