Sobrevivencia de la tonalidad

A pesar de este cambio radical hacia el atonalismo por parte de los principales compositores modernistas, gran parte de la música del siglo XX se mantuvo arraigada en la tonalidad de una u otra manera. A pesar del advenimiento de la música electrónica y otros intentos de dividir la octava en intervalos menores que el semitono, la mayoría de los compositores de música de arte siguieron trabajando con instrumentos convencionales de afinación temperada cromática (12 semitonos básicos); y a pesar de la exploración generalizada de combinaciones vocales e instrumentales novedosas (en la música escénica, por ejemplo), géneros tradicionales como la ópera, la sonata, el cuarteto o la sinfonía siguieron convocando a muchos compositores, quienes imprimieron muy pocos cambios en su estructura básica.